Hoy volvemos a poner nuestro punto de mira en el #debate sobre los valores patrimoniales de las antiguas estaciones de ferrocarril y sus usos en la actualidad.
Cuando, ante las necesidades de la nueva ciudad del siglo XX, muchas estaciones de ferrocarril quedaron obsoletas se pensó en su remodelación para que sirvieran como intercambiadores o antesalas de las nuevas construcciones. Sin embargo, una gran parte siguen esperando nuevos usos.
Desde Patrimonio Cultural Ferroviario creemos que por su gran valor patrimonial, su carácter monumental, su ubicación, su relación con los centros administrativos y sociales, así como por sus grandes espacios, estos edificios pueden asumir numerosas funciones al servicio de la ciudad.
Las nuevas necesidades de la ciudad del siglo XXI provocarán, de nuevo, grandes cambios en las estaciones, por ello se debería empezar a reflexionar seriamente, no solo sobre su preservación, sino también sobre su uso y las nuevas funciones que estos edificios pueden asumir sin perder su memoria.
¿Qué pensáis vosotros y qué ideas se os ocurren?
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